URRS: el gobierno traiciona al pueblo
Comencé este artículo a
raíz del deseo que tenía de informarme -sin demasiadas pretensiones-, sobre la
exploración rusa en los inmensos territorios de Siberia. Así por encima, lo
único que pretendía era pasármelo bien y, en plan aventura colonialista, encontrar
un buen relato sobre el valor y el sacrificio de los rusos que abandonaron la
comodidad de su hogar y se lanzaron a explorar un mundo donde reinaban el frío,
las taigas desoladas y las húmedas tundras. Con afán “civilizador” y deseos de
conocimiento sacrificaron sus vidas por el bien de la humanidad. ¿O no? ¡Sino
todo lo contrario!
Fuente: GeoCurrents
En este blog he publicado unos cuantos
capítulos de la exploración rusa en Siberia, donde un puñado de cosacos
atraviesan los Urales y van descubriendo los inmensos territorios de la llanura
central rusa, explorando ríos como el Lena y el Yeniséi y tomando contacto con
las diferentes etnias que habitan aquellos territorios. Su afán es enriquecerse
con el comercio de las pieles y, a medida que avanzan hacia los confines
siberianos, van creando las bases de un gran imperio, edificado sobre el
latrocinio, el pillaje y la expoliación de otras naciones.
A medida que avanzaba en el conocimiento de
lo ocurrido en aquellos lares, iba recibiendo informaciones más contemporáneas
sobre la URSS y su sistema de gobierno y, lo que más me extrañó, era el número
exagerado de blogs, páginas web y organizaciones en Internet que atacaban al
comunismo, a Stalin y, de paso, criminalizaban al pueblo ruso en general.
Informaciones
aparecidas en 1935, dos años después de la hambruna, exagerando el número de
muertos. Este diario, el Chicago American, en su portada dijo que fueron 6
millones. ¿Extraño, no. Cómo contó las víctimas? Fuente: GoFoto
Madre en
1933”
de Nina
Marchenko, Kiev 1998-2000. De la colección de pinturas “El
Holodomor visto a través de los ojos de artistas ucranianos”
Evidentemente,
un consenso tan grande respecto a una nación sólo puede surgir de la manipulación.
Entonces, sin duda alguna, las conclusiones expuestas en los llamados “blogs
liberales” no surgen de un estudio científico, sino que sólo pueden ser
producto de la propaganda antisoviética por parte de quien controla el poder en
Occidente, utilizando los medios de comunicación que controlan. Así al menos,
lo pienso yo, ya que por sistema suelo dudar de todo lo que proviene de esos
medios de comunicación.
¿Por qué soy un
escéptico?
Las personas racionales y escépticas tienen la obligación de evitar que
determinados "cuentistas sigan engañando a la gente; se trata de los que,
tomando el idioma y la apariencia de la ciencia, no hacen más que propagar
creencias sin fundamento racional alguno” (Manuel Toharia).
1. La propaganda anticomunista
Retomando el hilo de la cuestión, obviamente,
la mayoría de las acusaciones son meros eslóganes, falsificaciones de la
historia fácilmente desmontables aplicando el método científico en su análisis.
Los difamadores son, por lo general, periodistas ineptos y políticos peleles
del capitalismo, que a deshora y con retraso, les han llegado noticias de
alguna obra anticomunista del siglo pasado, aquellas que escribieron furibundos
anticomunistas que no dudaron en respaldar sus falsas acusaciones con datos
estadísticos, documentos y fotografías falsas o que no retrataban lo que rezaba
en sus títulos. Sin embargo, nunca pensé que estos anticomunistas fueran tan
duros de pelar, tan cabezotas y con tan poca capacidad de crítica.
Sobre las evidencias de que el llamado Holodomor no fue sino una invención
liberal para desacreditar el sistema soviético -y de paso al socialismo, al
comunismo y al marxismo-, preparo una entrada para el próximo artículo del
blog.
1a. El Libro negro del comunismo
Típico eslogan del vago mental: “El marxismo
causo más 100 millones de muertos. Solo trajo hambre, terror y represión”.
Seguramente, tal fantástica “información” la habrá obtenido de cuarta o quinta
mano de algún foro de futbol o coches, de
las web nazis, o de los blogs católicos… etc. que consideran como catecismo
anticomunista El libro negro del comunismo: crímenes,
terror y represión (1997), obra escrita por profesores
universitarios (como Nicolas Werth o Jean-Louis Margolin) y “experimentados
investigadores” europeos y editado por Stéphane Courtois, director de investigaciones
del Centre National de la Recherche Scientifique (CNRS), la mayor y más prestigiosa
organización pública de investigación de Francia. No quiero ni pensar cómo
serán las otras organizaciones de investigación francesas, teniendo en cuenta
cómo es ésta. Su propósito es catalogar diversos actos criminales (asesinatos,
tortura, de… bla, bla, bla!) (Wikipedia). La mayoría de los
que participaron en esa difamación de la Unión Soviética declararon su
arrepentimiento público al diario Le Monde.
“El Libro Negro del comunismo, editado por Stéphane Courtois, es una calumnia
contra los soviéticos que busca desacreditar y criminalizar el legado histórico
e ideológico del comunismo en la Historia. Se podría decir que es la Biblia de
todo anti-comunista que se precie, especialmente entre la extrema derecha. No
es de sorprender, por tanto, que aparezca para descarga gratuita en portales de Internet de claro contenido
neonazi, o que buena parte de la traducción de esta obra al castellano esté al
cargo de César
Vidal, escritor y periodista conocido por sus posiciones
conservadoras, en ocasiones cercanas al fascismo”. (Arqueo-historia
crítica)
César
Vidal y Jiménez Losantos, dos liberales de pro.
Los que defienden esta Biblia
anticomunista son lectores de derechas, acérrimos seguidores de los disidentes
rusos como Solzhenitsin,
Grossman,
Shálamov,
Vitaly
Shentalinski sobre los procesos a
los intelectuales o el libro del discípulo de Robert Conquest (al que muchos califican de nauseabundo por sus
falsedades) La risa y los veinte millones de Martin Amis
Koba.
De la web Archipiélago Libertad
Los grupos de poder occidental y sus
editoriales trabajan sin cesar. La colección La
Tragedia de la Cultura (Círculo
de Lectores-Galaxia Gutenberg) reúne a escritores asesinados, perseguidos o
silenciados por el estalinismo. Caballería roja
de Isaak
Bábel; La patria de la electricidad y otros
relatos de Andréi Platónov; Corazón
de perro de Mijaíl Bulgákov, Un espíritu
prisionero de Marina Tsvietáieva, La
infancia de Liuvers y otros textos de Borís Pasternak y Réquiem y otros
escritos de Anna Ajmátova. Todos para denunciar los
crímenes de Stalin y, de paso, vender buena literatura burguesa.
Pensamiento tradicional
burgués expuesto con prosa literaria de máxima calidad.
1b. Vitali Shentalinski
Nacido en 1939, fue el
primero de los investigadores rusos en trabajar en los archivos del KGB donde
se conservan los expedientes de los escritores y de lo que hicieron con ellos.
De esa inmersión en los dosieres secretos de Bulgakov, Mandelstam, Pilniak, Babel,
Platonov y otros escritores asesinados o conducidos prematuramente a la muerte
sale un testimonio pavoroso en tres volúmenes titulados Esclavos de la
libertad, Denuncia contra
Sócrates y Crimen sin
castigo, una
documentación de gran valor.
No voy a discutir yo la sangrienta represión
de los escritores que se vivió en la Unión Soviética. Sin embargo, la finalidad
de su publicación, como siempre, huele a antisovietismo y anticomunismo. Lo
justo hubiese sido acompañar la denuncia con datos de los crímenes cometidos en
todas partes del mundo contra los escritores, encuadrándola dentro de una
especie de historia universal de la
infamia. Esto nos retrata al tema del Libro negro del
comunismo y su respuesta en
el Libo negro del capitalismo.
Explica Jesús Aller en
Vitali Shentalinski en los archivos de la Lubianka (Rebelión) que “la represión del pensamiento disidente por
parte del poder es algo universal y la diferencia está en las formas y grados
de esta represión. La persecución de escritores en la época post-estalinista de
la URSS analizada cuantitativamente mostraría probablemente índices no muy
distintos de los que se dieron y dan en otros regímenes autoritarios”.
Vitali Shentalinski en su estudio de la
destrucción de la intelligentsia rusa, encontró abundante documentación sobre
la miseria moral, la ambivalencia, la delación, el terror y los asesinatos.
Este drama existió, pero no sólo en la URSS, sino en muchos países
dictatoriales y “democráticos”, y todavía sigue existiendo.
El mismo escritor hizo estas declaraciones
al diario El País “la popularidad de Stalin crece en Rusia cada
día y la sociedad rusa está partida en dos. El otro día se hizo un sondeo en el
que preguntaba de qué lado te pondrías si mañana se repitiese la revolución de
1917, y las respuestas fueron del cincuenta por ciento para los rojos y
cincuenta por ciento para los blancos. Da la impresión de que estemos en
vísperas de la Revolución, que hemos vuelto a 1917, que no hemos aprendido
nada. Por eso creo que este trabajo es importante” (El País. Martes, 20 de enero de 2009. Entrevista a Vitali Shentalinski. Investigador de los
escritores represaliados por el KGB. Ignacio vidal-Folch)
Amor a Stalin. La
popularidad de Stalin está creciendo en Rusia.
Por supuesto, no todos los intelectuales
tenían la catadura moral y el valor del poeta Ossip Mandelstam o Mihail Bulgakov (El Maestro y Margarita, Los días de Turbin…), presionados para que
escribieran sobre la clase obrera, nunca claudicaron de sus ideas y prefirieron
la muerte a traicionar su consciencia.
1c. Los falsos intelectuales liberales
Pero yo, cuando hablo de intelectuales
liberales me refiero a los que se han vendido al capital. ¿Quiénes son estos
intelectuales tan ilustres que defienden la democracia –según ellos, claro-? Durante
la década de los 70, en los EEUU, toda una generación de intelectuales
americanos, liderados por Norman Podhoretz y Irving Kristol, se pasó de la
izquierda radical a la derecha republicana. En el Estado español el fenómeno
también tuvo sus imitadores. Se trataba de Pio Moa, Federico Jímenez Losantos o Jon Juaristi, se pasan a la derecha.
Estos “intelectuales” provenían de organizaciones
armadas sanguinarias como el GRAPO o ETA (el caso de Pio Moa y Jon Juaristi) o
de organizaciones revolucionarias con vocación totalitaria. Parten de una
izquierda radical antidemocrática para bascular hacia una derecha radical
antidemocrática. De esta forma, Pío Moa reivindica
las bondades del franquismo y Jímenez Losantos (Organización Comunista de España -Bandera
Roja, de ideología maoísta, y Partit Socialista Unificat de Catalunya, de ideología comunista) resucita el concepto de
las “dos Españas”, reverdeciendo los laureles de la teoría de la conspiración
rojo-separatista (Aberriberri bloga de Imanol Lizarralde). Todos ellos se
han convertido en desinformadores profesionales, al servicio del capital.
Y los que no provenían de organizaciones
armadas sanguinarias eran unos auténticos falsarios. César Vidal –el traductor de El
Libro negro del comunismo- ha escrito muchos libros y, según la
mayoría de los investigadores lo ha hecho con referencias bibliográficas
imprecisas, falsas o inexistentes. Se inventa fuentes y sus traducciones son
erróneas. Algunos historiadores le acusan de plagiador (Wikipedia)
Sus obras suelen contener muchas
páginas vacuas, sin contenido, y resulta difícil saber cuáles son los objetos
de análisis en sus libros. Cuando realiza una crítica de algo, suele utilizar
notas improcedentes o de relleno, con siglas que pertenecen a fuente ignotas,
una bibliografía contextual que no se
utiliza en el texto y, además, con títulos deliberadamente poco accesibles al
lector español, que se citan de forma incompleta o que no aparecen en la
relación final. Este sería el método de investigación de César Vidal según el historiador
Eduardo
González Calleja (Wikipedia).
Entre las críticas más fuertes recibidas
por César Vidal destacan la de los historiadores Ian Gibson y Ángel Viñas que
lo acusan de tergiversar la historia, de citar fuentes falsas y no
comprobarlas. Ángel Viñas dice que "Vidal
se ha basado en la tergiversación y distorsión de documentos a sabiendas que
muy pocos de sus lectores estarán en condiciones de comprobar sus afirmaciones.
Si falsifica datos que cualquiera puede encontrar fácilmente en hemerotecas,
¿qué no hará cuando alega basarse en archivos menos asequibles?" (Ángel Viñas
(2007), «Tergiversaciones calumniosas». El escudo
de la República. Barcelona: Crítica. p. 69).
A CÉSAR
VIDAL
No me mueve, ¡ay, Dios!, para ofenderte
el rostro que te tienes merecido,
ni el presumir de lo que nunca has sido,
falto de títulos que puedan defenderte.
Muéveme, sí, el hecho de saberte
digno de que te llamen malnacido,
pues, a fuerza de ser un resentido,
tu pluma lo que toca lo pervierte.
Calla, César, que puede serte caro,
si insistes tú en ir de hijo de puta,
pues en tu albarda pesa el equipaje.
Ya que eres en Historia tan ignaro,
deja el pasado en paz, cambia de ruta,
dedícate a los toros... o al encaje.
Para ampliar información sobre el “método Vidal”
podéis consultar el artículo de la Wikipedia “César Vidal”. Desenmascarando uno
de estos “sabios liberales”, ya podemos hacernos una idea de cómo son los
demás: ¡Idénticos! Carecen de prestigio en cualquier universidad mundial que no
sea de pago. Y, además de cretinos, le gusta presumir modestamente (valga el
antónimo) de borricos -que lo son-, afirmando cosas como que “no está probado que unas especies hayan
evolucionado desde otras”.
Para César Vidal, el castellano es casi
perfecto. Cuando a finales del siglo X allá por la Rioja, al pie de la Sierra
de la Demanda, se desglosó una obra escrita en latín con palabras castellanas,
surgió el idioma más perfecto y universal del mundo, en opinión de Vidal
(apellido de origen aragonés –donde no queda ni uno- muy abundante en
Barcelona, Tarragona y Valencia, junto con los 5276 de Madrid, procedentes de
la migración). Sin embargo, el romance que se hablaba en el siglo X por aquellos
lugares de la Rioja, era el dialecto riojano, una mezcla de otras lenguas, pues
la región sufría interferencias de otros pueblos y sus lenguas, según Alarcos
Llorach, E. en El español,
lengua milenaria (y otros escritos castellanos).Valladolid, 1982,
pág. 12. Ver La datación y procedencia de las glosas
emilianenses y silenses de Claudio y Javier García Turza, en Valdenajerilla.
En el siglo X se estaban produciendo
divergencias a la hora de hablar el latín en toda la península. El habla
riojana estaba muy impregnada de los caracteres navarro-aragoneses, del euskera
y castellanos, junto con los específicamente riojanos. Menos el euskera, todos
estas hablas que hemos nombrado derivaron del latín. César Vidal afirma que
todas, menos el catalán, que es una especie de jerga o jerigonza derivada del
provenzal. ¿Y el valenciano? Es otra lengua diferente del catalán, seguramente
bereber o un resto de alguna tribu hispano-valentina cobijada bajo el domino musulmán.
Asimismo, también ha negado la existencia
del asturleonés como grupo lingüístico autónomo y con entidad propia,
calificando el asturiano de «dialecto del castellano», caracterizado únicamente
«por finalizar las palabras en u».
César Vidal, premio
Torsón de Oro 2013, junto Federico Jiménez Losantos. Fuente: LibertadDigital. “Las cualidades indispensables al cultivador de la investigación son: la
independencia mental, la curiosidad intelectual, la perseverancia en el
trabajo, la religión de la patria y el amor a la gloria” Reglas y consejos sobre investigación científica,
de Santiago
Ramón y Cajal (Centro Virtual
Cervantes).
Dios los crea y ellos se juntan.
1d. El baile de cifras
César Vidal ha sido reconocido
internacionalmente con numerosos premios otorgados por instituciones liberales,
agrupaciones de derechas y ultraderechas y otras entidades afines
ideológicamente. Se supone, como ya habíamos dicho, que ha traducido parte del catecismo
del perfecto facha titulado El Libro Negro
del comunismo,
proporciona los siguientes datos (la mayor parte falos):
Baile de cifras estadísticas (Seguramente, casi todas falsas o defectuosas. A usted le conviene
saltarse este apartado si no quiere perder el tiempo. ¡Se lo he advertido!
–Terror nazi: 15 millones de
civiles muertos en los países ocupados; 5,1 millones de judíos; 3,3 millones de
prisioneros de guerra soviéticos; 1,1 millones de deportados muertos en los
campos; varios centenares de miles de gitanos; 8 millones de personas
condenadas a trabajos forzados y 1,6 millones de detenidos en campos de
concentración que no murieron. En total 25 millones de muertos, y un total de
35 millones de represaliados.
Felix Nussbaum, el pintor del terror
nazi. “Triunfo de la muerte”, fechado el 18 de abril de 1944, pocos meses
antes de que fuese asesinado.
–Terror en la URSS:
1º. Fusilamiento de “decenas
de miles” prisioneros, asesinato de “cientos de miles” de obreros y de
campesinos rebeldes entre 1918 y 1922. Según el lumbreras Horacio Vázquez-Rial de Libertad Digital, -autor de lo que
acabamos de reproducir- esto es “más que
el total de los muertos por el terror zarista en 400 años, en sólo cuatro”.
Planteado así, el problema es difícil de
resolver, porque desconocemos el número de los muertos por el terror zarista.
Si utilizamos la lógica, más de una decena serían decenas y, los mismo vale
para cien y cientos. Por lo tanto, 2 decenas de prisioneros son 20.000 fusilados
y 200.000 obreros y campesinos asesinados; en total 220.000 muertes. ¿O no
están conformes con el cálculo? Pues, entonces, exíjanle al que facilita los
datos mayor precisión.
2º. Hambruna
–planificada– de 1922: 5 millones.
3º. Liquidación y deportación
de los cosacos del Don en 1920 y asesinato (entre 1918 y 1930) de decenas de
miles de ellos. Total 20.000 cosacos muertos.
4º. En la Gran Purga de
1937-38 mataron a 690.000 personas.
5º. Entre 1930-32 deportación
de 2.000.000 de kulaks. Muerte por hambre provocada de 6.000.000 de ucranianos.
6º. Entre 1939-41 y
1944-45 deportación de “miles” de personas procedentes de Polonia, Ucrania, los
países bálticos, Moldavia y Besarabia.
7º. En 1941 deportación de los alemanes del Volga;
deportación y abandono de los tártaros de Crimea en 1943, de los chechenos en
1944, de los ingusetios en 1944.
Imagen
que se reproduce en miles de webs achacando la matanza a los soviéticos, cuando
en realidad se trata de las puertas del crematorio del campo de Dachau. Fuente:
Recuerde
no repita
Holocausto Nazi - Campo
de concentracion de Dachau. Fuente: El Vocero Digital
Dachau, 1945. Fuente: Fragments de vida
Todas las fotografías
de cadáveres pertenecen a los montones que se hacinaban en la puerta del
crematorio de Dachau. Sólo los malnacidos pueden olvidarse del sufrimiento de
estas personas y utilizar sus cuerpos para difamar un sistema, el soviético,
que no puede compararse ni, por asomo, con los crímenes nazis.
Según mis cálculos (como no tengo
estadísticas, me limito a interpretar literalmente
lo que dice Horacio Vázquez-Rial) el asunto quedaría, más o menos, así.
Apartado
1: 220.000 muertos; apartado 2:
5.000.000; apartado 3: 20.000
muertos; apartado 4: 690.000 muertos;
apartado 5: 2.000.000 deportados y
6.000.000 muertos; apartado 6: 2.000 deportados; apartado 7: no hay cifras.
Total muertos 11.930.000 y 2.002.000 deportados, faltando sumar los alemanes,
tártaros, chechenos y ingusetios, de los que carecimos de cifras. TOTAL: 13.932.000 víctimas.
Disculpen ustedes por haberles hecho
perder tanto tiempo. Les he mostrado como se inventan las cifras esos supuestos
“historiadores” del Libro Negro. Ahora ustedes tienen elementos para juzgar y
decidir. Pero no crean que esto ha terminado. Los manipuladores nunca descansan
y todavía no les he enseñado las cifras
de muertos que predican, por ejemplo, para la China 75 millones de muertos, 2
millones en Camboya, 1 millón en Vietnam, 2 millones en Corea… Todo eso, por
supuesto, dicen que lo hicieron los comunistas, como si los americanos hubiesen
estado echando rosas, en vez de napalm.
Fuentes
El Libro negro del comunismo,
editado por editado por Stéphane Courtois (PDF de Defenderlapatria)
El Gran Terror, Robert
Conquest (PDF de Archipíelago
Libertad)
Jesús Aller en Vitali Shentalinski en los archivos de la Lubianka (Rebelión)
El País. Martes,
20 de enero de 2009. Entrevista a
Vitali Shentalinski. Investigador de los escritores represaliados por el KGB.
Ignacio
vidal-Folch
Ángel Viñas (2007), «Tergiversaciones
calumniosas». El escudo de la República. Barcelona: Crítica
Alarcos Llorach, E. en El
español, lengua milenaria (y otros escritos castellanos).Valladolid,
1982
La datación y procedencia de las glosas emilianenses y silenses de Claudio
y Javier
García Turza, en Valdenajerilla
Reglas y consejos sobre investigación científica, de Santiago Ramón
y Cajal (Centro
Virtual Cervantes)
Cifras sobre el “Terror comunista” en Horacio
Vázquez-Rial de Libertad
Digital
¿Qué le ocurrió a la URSS?
22. La
Kakistocracia
20. Rusia
"libre"
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