La Anunciación de Carlo Crivelli

1. Carlo Crivelli. La Anunciación

       Si observamos el número de páginas web de los ufólogos dedicadas a la Anunciación de Carlo Crivelli, podríamos pensar que los defensores de los platillos volantes también saben apreciar la belleza artística que encierra esta obra. Pero cuando leemos sus escritos, nos damos cuenta que para nada les importa la perspectivas, la perfección de los detalles, ni los colores utilizados. Citan la obra porque en ella aseguran que aparece un ovni,  un rayo que baja del cielo y golpea a la Virgen, achicharrando de paso al Espíritu Santo. Dicen y aseguran que el rayo lo emite una nave espacial que está en las nubes. Y como siempre sucede, todas las reproducciones de la obra que nos ofrecen son borrosas y de mala calidad, como si buscasen una copia que nadie pudiese descifrar. 







 Carlo Crivelli La Anunciación
( National Gallery , Londres)






      En la página web El arte y los ovnis en el pasado, se afirma que esta obra contiene una imagen difícilmente detectable en los libros de arte, incluso en la misma galería donde está expuesta no la podemos apreciar bien. No es una señal de Dios, sino un ovni que vio el artista y su conciencia le hizo inmortalizar en uno de sus cuadros. En otra web llamada ovnis de Crivelli se dice que el cuerpo del cielo es sólido, con una estructura circular muy diferente de las nubes circundantes, como el ovni descubierto en Véneto en 1999. Para nada es el círculo del sol y el rayo una emanación de la energía divina y termina, como muchos, diciendo que el lector decida. Se recurre para defender este argumento a la libertad y a que todo es relativo: lo mismo vale la opinión del estudioso que la del panadero, o la de un astrónomo y un albañil. También un tal Roberto Volterra afirma que no hay ninguna duda de que se trata de un objeto volador, de una nave espacial.


      Con esto, una vez más, estos ufólogos visionarios de naves espaciales, demuestran que en su vida han pisado un museo de arte. De lo contrario, hubiesen visto un montón de anunciaciones en las que se representa un rayo que cae del cielo hasta llegar a la Virgen María, porque este es el camino, la vía, en la que el espíritu Santo baja del cielo para hacerle el anuncio a Maria, conforme lo expresa el Evangelio de Lucas. En muchas pinturas del rayo pasa a través de una ventana cerrada o una pared que simboliza la virginidad de María. El mismo significado tiene un jardín rodeado por un muro (hortus conclusus), símbolo de la castidad, que se ve a menudo en el fondo.


      Llegados a este punto, volvamos a mirar con cuidado una buena reproducción de La Anunciación de Crivelli y veremos cómo el rayo sale del interior de un círculo de nubes formadas, formadas a su vez, por dos círculos de pequeños ángeles.





     Esta es una representación de la deidad generalizada, visible en tantas obras de arte religioso. Lo vemos en una Anunciación de Luca Signorelli.





      Abajo podemos ver la cúpula de la catedral de Parma pintada por Correggio y una Virgen con el Niño de Lorenzo Lotto:










      Gustave Doré, a mitad del siglo XIX, retoma el tema de la nube formada por una vorágine de ángeles en esta ilustración para la XXXI canto de Paraíso de Dante.






***

2. Algunas Anunciaciones con nubes en forma de disco, los ángeles y los rayos:






Anunciación de Anton Raphael Mengs. Museo del Hermitage






La Anunciación de Juan de Valdés Leal (1661). Lienzo. 108 x 79cm. Museo de la Universidad de Michigan.






Anunciación (c. 1560, manierismo. Tabla 850 × 1124) de Paolo Veronese







Anunciación de Goya, 1785. Óleo sobre lienzo. Colección Duquesa de Osuna – Sevilla




La Anunciación (Entre 1700 y 1714) de Francisco de Villalpando. Óleo sobre tela 186 x 108 cm. Museo Regional de Guadalupe Zacatecas, Zacatecas, México.





Anunciación a María. Tabla flamenca pintada en 1584 por Gillis de Coingnet. Catedral de Santamaría La Redonda (Logroño)




La Anunciación de Vittore Carpaccio en la Ca' d'Oro de Venecia.




Anunciación (hacia 1645) de Francesco Albani, Museo del Ermitage, San Petersburgo.




Bautismo de Cristo, de Francesco Albani. Museo del Ermitage, San Petersburgo.




Anunciación de Philippe de Champaigne




Anunciación de Alejo Fernández (Museo de Bellas Artes de Sevilla).




La Anunciación de Goya (1785). Boston




Fra Angelico (Guido di Pietro) (1387 - 1455), Anunciación 1430. Santa Maria delle Grazie – Milán




Fra Angelico. Detalle




Anunciación (1559) de Correa de Vivar. Óleo sobre tabla. 225 x 146 cm. Museo del Prado (Madrid, España)




Anunciación (c. 1550) de Jerónimo Cósida. Óleo sobre tabla de pino, 67,5x 51,5 cm. Museo de Bellas Artes de Bilbao






Cappilla del Centrum Aletti de Olomouc. Repubblica Checa




Henry Ossawa Tanner. The Annunciation. Museo Arte Philadelphia, 1898.

***

       A continuación, una serie de anunciaciones bizantinas con los rayos que bajan del cielo, ahora convertidos en formas abstractas como representación de la deidad. Aunque los ufólogos afirmen que esto son ovnis, en realidad, son agujeros entre las nubes del cielo por los que Dios se comunica con los humanos, por donde salen los rayos de luz por los que desciende el Espíritu Santo o los Ángeles para hacer sus anuncios a los humanos.













Anunciación. Pintura al temple de huevo sobre tabla. Oro fino al agua. 54cm x 43cm. Colección particular.

















Icono siriaco-maronita


   "La Paloma del Santo Espíritu, por lo general, desciende a lo largo de un haz de luz que termina en la cabeza o el vientre de María. En el cielo, la fuente de esa luz, parece que procede de Dios Padre. La imagen hace referencia a la concepción de Jesús por Maria, a la encarnación de Dios gracias al Espíritu Santo que descendió del cielo (…) Incluso los rayos de luz que pasan a través del cristal de la ventana son un símbolo de la virginidad. (...) María también se puede encontrar dentro de un jardín rodeado por un muro (el Conclusus) llamado Hortus, o en una torre, ambos símbolos de la castidad de María "(J. Hall en el "Diccionario de temas y símbolos en el arte ").


Conclusiones:


      En el cuadro de Carlo Crivelli, titulado La Anunciación no hay ovnis. El rayo que incide sobre la Virgen, que escucha las palabras del ángel anunciador, procede del interior de dos círculos de pequeños ángeles, que forman una nube circular. Por el rayo de luz desciende el Espíritu Santo, pues María concibió por obra y gracia de este espíritu. Este tipo de representación de la gracia de Dios aparece en muchas otras obras de arte medieval y renacentista, y en la mayoría de las obras que representan la Anunciación y el Bautismo de Cristo.

La Velleta Verda, 2011




Comentaris

NORA ha dit…
COMPLETISIMO LA RECOPILACION DE OBRAS SOBRE LA ANUNCIACION, PARTIENDO DE LA OBRA DE CRIVELLI,ALTAMENTE RECOMENDABLE.. NORA
Anònim ha dit…

Cuaresma: Culto a Semiramis, Nimrod y Tammuz

Si está muy completo, la verdad soy Judio no Cristiano pero tengo está información para usted, que coincide con tu trabajo completisimo.

El Pastor David L. Brown, Ph.D. de Logos Resource Pages, escribe:
”Conforme a la antigua leyenda, Nimrod murió, y vino a ser el dios sol. Su mujer Semíramis fue impregnada por un rayo del sol, y dio a luz a Tammuz (un falso nacimiento virginal). Más tarde Tammuz fue muerto por un jabalí. No obstante, después del clamor de Semiramis por 40 días, Tammuz vuelve a la vida, lo cual es una falsificación de la resurrección. De hecho, este fue el origen del falso sistema religioso que envuelve la adoración a la madre y al hijo. De hecho, durante la cautividad de Babilonia, en Jeremías vemos que esa fue la adoración de Israel, la abocada a Semiramis como “Reina del Cielo” (Jer. 7; 18, 19; 44: 15-30).

Entrades populars